lunes, 21 de noviembre de 2011

LA TV DE HOY

  Para poder plasmar un análisis de la televisión argentina actual, realizaremos una división que quizá pueda ser simplista y poco compleja pero que es valida a la hora realizar una reflexión. Podemos decir entonces que la TV nacional se divide así en dos partes, por un lado la técnica y por el otro la mas interesante, la parte de los contenidos. En cuanto a lo referido a los aspectos técnicos, no caben más que elogios, puesto que la TV Argentina en este respecta es muy rica y de gran profesionalismo, con estéticas innovadoras, con ingenio, dinámica y recursos que la hacen increíblemente atractiva.
 Ahora bien, si lo que vamos a analizar son los contenidos, se puede observar de inmediato y bajo un escueto análisis que la realidad es inversamente proporcional. Quiero decir que mientras técnicamente se vuelve paulatinamente más atractiva, innovadora y perfeccionista, los contenidos son menos atractivos, repetitivos, paupérrimos y para nada superadores.
 No es difícil hacer una crítica negativa y para algunos inmensamente pesimista sobre el futuro de la televisión, la mayoría de los intelectuales concuerdan en que el medio esta en decadencia. Por mi parte creo oportuno citar la frase de Umberto Eco quien asegura; “hay algo absolutamente tranquilizador sobre la televisión: lo peor está siempre por venir.” Creo oportuna y acorde dicha exclamación ya que resume en base a mi estudio y contacto con los medios audiovisuales, las conclusiones a las que eh llegado.
  Las mismas nacen en el seno de un análisis que podríamos denominar como ambivalente, ya que estará sustentado en la historia mas relevante del medio y en el presente o actualidad de este. Citando ahora la entrevista a Carlos Mangone en la Revista “Trampas” veremos como claramente se explican los motivos por los que la TV esta en decadencia;  la desestructuración social después de los años ’70, hace posible solo este medio sea capaz de nuclear todos los átomos de la sociedad, la perdida de influencia letrada, la posibilidad real de ampliar el numero de aparatos en cada hogar, la reformulación del discurso político en el mundo y la TV convirtiéndose en una practica mas de la vida social, fueron los motivos por los que hoy en día se pueda sostener que la practica televisiva esta en crisis.
  Desde la actualidad podemos observar usando el ejemplo por excelencia, Marcelo Tinelli, que todo lo anunciado desde el campo teórico es tangible en la practica ya que no es difícil encontrar como los medios hacen auto mención constante, los contenidos, paupérrimos desde sus inicios, además se reciclan una y otra vez por todos los canales de aire, los programas de interés son islas cada vez menos frecuentes. Al contrario de lo que debería pasar, no es lo intelectual que avanza por sobre lo que amablemente podría llamar chatarra, si no mas bien es la chatarra que avanza sobre lo intelectual.
 Podemos concluir así diciendo que, las opciones que este medio da son cada vez menos, el avance es inminente, hoy en día no es raro ver a los noticieros hablar de “Gran Hermano” o de “Bailando”, los directores de diarios supuestamente progresistas y de nivel, esperan el cierre de redacción a que finalicen estos programas tan solo para reseñarlos, mas del 60 % de los personajes que circulan los medios, no son ni artistas, ni intelectuales, si no vedette, modelos, mediáticos y políticos sedientos de un minuto de aire.
 Es así que la tan esperada ley de medios y su diversidad de contenidos se presenta en la realidad televisiva, como la única esperanza para todos los que soñamos que este medio vuelva a tener el resplandor que supo tener en otros tiempos.

Diego Fernández

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